Bruxismo: en qué consiste y cómo tratarlo

¿Qué es el bruxismo?

El bruxismo es una patología o parafunción mandibular que consiste en apretar de forma inconsciente la mandíbula, teniendo como principales consecuencias el desgaste de los dientes, la sensibilidad al frío, movilidad e incluso puede generar la pérdida de los dientes. Este hábito es también conocido como el “rechinar” de los dientes y suele darse cuando dormimos.

Causas del bruxismo

El bruxismo es un problema bastante habitual en los niños cuyos dientes rozan produciendo un molesto ruido a causa del rápido crecimiento de la dentición.

También es un problema en adultos , y para poder combatirlo hay que conocer qué lo provoca. Estas son algunas de las causas por las que se da esta patología:

• Ansiedad y estrés: es la causa más común. Enfrentarnos a situaciones que nos producen ansiedad hacen que nuestras mandíbulas se tensen y se de la fricción de los dientes.
• Problemas bucodentales previos: tener problemas bucodentales tales como una mordida que no encaje o la falta de algún diente que provoca el roce con otros puede desembocar en bruxismo. En este caso, el profesional será quien nos asesore con el tratamiento que mejor se nos ajuste.
• Trastornos del sueño: sufrir este tipo de trastornos que impiden que descansemos correctamente puede llegar a producir tensión en nuestra mandíbula.
• Malos hábitos: el consumo regular de tabaco, cafeína y alcohol aumenta el doble de probabilidades de sufrir bruxismo.

¿Cómo tratar el bruxismo?

Los tratamientos y terapias que se aplican para paliar el bruxismo están orientados a la reducción del dolor, a evitar el desgaste de las piezas dentales y eliminar los daños en la mandíbula. Las férulas de descarga y protectores dentales suelen ser las medidas más comunes en este tipo de patología.

Las férulas de descarga son un aparato dental, que tiene la apariencia de una funda para los dientes. Este aparato hace que los músculos de la mandíbula se relajen, evitando así el rechinamiento de dientes. Sin embargo, hay que tener en cuenta que, aunque estos elementos alivien las molestias y eliminen el dolor, en el momento que dejen de usarse, las dolencias volverán a aparecer.

Algunas medidas que se deben tener en cuenta son:

• Evitar alimentos dulces y duros.
• Realizar ejercicios de relajación que reduzcan el estrés. Por ejemplo, hacer yoga, darse masajes, baños relajantes, o escuchar música relajante antes de dormir.
• Dormir las horas recomendadas.
• Beber mucha agua a diario.
• Ortodoncia para corregir los posibles desperfectos dentales.
• La cirugía se tendrá en cuenta como último recurso.

Como hemos comentado anteriormente, el bruxismo es inconsciente y nocturno, y la única manera de diagnosticarlo es cuando dormimos. Un diagnóstico a tiempo puede evitar futuras complicaciones bucodentales.